"SERÁ MEJOR": Último Lanzamiento

"NADA ME PODRÁ VENCER": Último Lanzamiento

SERÁ MEJOR

Sencillo

  • Compositor: Antonio Valero

  • Ingeniero de Grabación: Miguel Ángel Yance

  • Ingeniero de Mezcla: Miguel Ángel Yance

  • Ingeniero de Masterización: Francisco Holzmann de Holz Masters (Santiago de Chile)

  • Estudios de Grabación: MCA Studios (Lima, Perú) | Grandesigns Studios (Athens, Georgia, EE. UU.)

  • Diseño de Portada: Fotográfica Films

  • Logotipo de "SERÁ MEJOR": Gerardo Larrea

NADA ME PODRÁ VENCER

Sencillo

  • Compositor: Miguel José Flores

  • Ingeniero de Grabación: Miguel Ángel Yance

  • Ingeniero de Mezcla: Miguel Ángel Yance

  • Ingeniero de Masterización: Francisco Holzmann de Holz Masters (Santiago, Chile)

  • Estudios de Grabación: MCA Studios (Lima, Perú) | Vitto Galiano's Studio (Athens, Georgia, EE. UU.)

  • Diseño de Portada: Fotográfica Films

  • Logotipo de "Nada Me Podrá Vencer": Fotográfica Films

  • Ilustración IA: Grandesigns Studios

  • Edición: Fotográfica Films

  • Logotipo de "Será Mejor": Gerardo Larrea

SERÁ MEJOR

Video Oficial

NADA ME PODRÁ VENCER

Lyric Video

Cuarta canción en el trayecto creativo de La Rattio rumbo a su segundo álbum de estudio, “Será Mejor” representa una de las piezas más sinceras y emocionalmente introspectivas del repertorio de la banda. Escrita en 2007 por Antonio Valero, la canción se inspira en un hecho real: la repentina e ineludible partida del hogar de la hermana de un amigo cercano, episodio que se convirtió en un espejo revelador de las complejidades afectivas que se esconden detrás de los vínculos familiares.

Narrada en primera persona, “Será Mejor” no es simplemente una crónica de un alejamiento; es un retrato íntimo del momento exacto en que el dolor se transforma en decisión, y la decisión en libertad. Con una lírica sobria y reflexiva, la canción logra destilar esa mezcla de tristeza, alivio y determinación que muchas veces acompaña a los quiebres afectivos. Es una composición que no busca emitir juicios, sino comprender desde la sensibilidad, donde el acto de partir no es abandono, sino a veces la única forma posible de preservarse.

En tiempos donde las lealtades familiares suelen estar revestidas de una narrativa incuestionable, esta canción propone una epifanía: el verdadero acto de madurez no siempre está en resistir, sino en tener la lucidez de saber cuándo irse. Y hacerlo con respeto, con dignidad, y sobre todo, con la certeza de que hay un amor que también se expresa en el silencio de una despedida. “Será Mejor” nos recuerda que hay decisiones que, aunque duelen, tienen el poder de sanar lo que ya no puede ser reparado desde adentro.

Vitto Galiano, desde su estudio Grandesigns Studios en Athens, Georgia, EE. UU., llevó a cabo la producción de un videoclip desarrollado casi en su totalidad mediante Inteligencia Artificial, a partir de un guion elaborado por Fotográfica Films en Lima, Perú.

El proyecto implicó la creación minuciosa de dos personajes principales —un hombre y una mujer— cuyas acciones y expresiones visuales acompañan y amplifican el contenido lírico y melódico de “Será Mejor”. Galiano diseñó, animó y dio coherencia narrativa a cada escena utilizando herramientas avanzadas de IA, aplicando criterios de dirección de arte, ritmo visual y narrativa audiovisual con precisión técnica.

La ejecución requirió un trabajo cuadro por cuadro, integrando imágenes dramáticas, melancólicas y esperanzadoras, logrando que la pieza no solo funcionara como acompañamiento musical, sino como una obra audiovisual autónoma. El resultado pone de manifiesto su dominio en la intersección entre arte digital y tecnología, así como su capacidad para transformar un concepto narrativo en un producto visual de nivel.

La génesis de “Nada Me Podrá Vencer” ocurrió en movimiento, en ese espacio de introspección y esfuerzo donde el cuerpo y la mente convergen. Mientras corría, como cada mañana a las 6 a.m., Miguel José Flores sintió emerger una tonada en su pensamiento, y con ella, de manera nítida y contundente, la frase que daría nombre a la canción. No hubo titubeos ni correcciones: las palabras surgieron con una claridad absoluta (nada me podrá vencer), reflejando quizás esa pequeña victoria cotidiana que supone levantarse y enfrentarse al clima, al cansancio, a uno mismo.

Pero la canción no se detuvo ahí. Fue cobrando forma en los trayectos urbanos que Miguel José recorre camino al trabajo, entre escenarios dispares, calles de contrastes y miradas fugaces que cuentan historias. La diversidad de las personas, sus luchas anónimas, los rostros de perseverancia y fragilidad que pueblan la ciudad, fueron alimentando el espíritu de la composición. Así, lo que nació como un impulso personal trascendió hacia un mensaje más amplio: una declaración de resistencia, una oda a la fortaleza que habita en cada paso dado a pesar de las adversidades.

Con una identidad sonora que evoca la fusión estilística de los años 70, "Nada Me Podrá Vencer" aparece como un testimonio de la atemporalidad del groove, donde el rock dialoga con la cadencia del funk y la profundidad del soul. Su arquitectura musical, concebida con un equilibrio exquisito entre pasajes serenos y explosiones de intensidad vibrante, proyecta una presencia imponente que resuena con elegancia en el paisaje contemporáneo. En este viaje sonoro, la nostalgia y la modernidad convergen, dotando a la composición de una personalidad magnética que trasciende el tiempo y se inscribe con determinación en la sensibilidad del presente.

Las fotografías de este lyric video fueron realizadas por Fidel Carrillo. La mirada de Fidel trasciende la simple captura de imágenes; es un ejercicio de comprensión profunda, un acto de testimonio visual que, con la agudeza de quien ha recorrido la urdimbre urbana durante más de 25 años, extrae de la ciudad sus verdades más crudas y su poética más inadvertida.

El Perú, con su geografía de contrastes, sus ciudades con calles cargadas de historias y sus habitantes que resisten y sueñan, es el escenario donde su sensibilidad documentalista se despliega con maestría. No es solo el instante decisivo lo que lo mueve, sino la confluencia de atmósfera, luz y emoción, elementos que orquesta con precisión obsesiva para construir imágenes de una profundidad conmovedora.

El pulso de su fotografía está marcado por una obsesión por el color y el equilibrio, una búsqueda estética que no traiciona la esencia del relato, sino que lo potencia. Fidel ha abordado temas esenciales como la migración, la identidad y la ceguera, siempre con la intuición y el respeto de quien entiende que detrás de cada rostro, cada sombra y cada textura hay una vida que merece ser contada.

Su experiencia en medios escritos ha forjado en él una mirada que no se conforma con la superficie; su lente penetra, indaga, dialoga. Como freelance, sigue recorriendo las calles, enfrentándose a la ciudad y a su compleja humanidad con la misma intensidad con la que un poeta se enfrenta a la página en blanco: con la certeza de que cada imagen es un verso por revelar.

Cuando escuchó “Nada Me Podrá Vencer”, Fidel sintió un vínculo inmediato con su mensaje. La lucha, la resistencia y la fortaleza que emanan de la canción resonaron con la esencia misma de su fotografía: una mirada comprometida con la realidad, que encuentra en lo adverso una expresión de belleza y en la resiliencia una forma de arte. Así, con esa convicción, se sumó a este proyecto, tejiendo con sus imágenes un relato visual que dialoga con la letra, convirtiendo este lyric video en una pieza donde música, palabras y fotografía convergen en un mismo latido.

“Nada Me Podrá Vencer” fue grabada y mezclada por el Ingeniero de Estudio Miguel Ángel Yance en el icónico MCA Studios de los Maestros y hermanos Saul y Manuel Cornejo, en Lima, Perú. Fue masterizada por el Ingeniero de Masterización Francisco Holzmann de Holz Masters, en Santiago, Chile. Y la batería fue grabada en Vitto Galiano's Studio, en Athens, Georgia, EE. UU.

El tema también recibió la enorme colaboración vocal en los coros por parte de Ana Liberata y Jeshua Peralta, que elevaron la canción hasta la estratósfera. Y por si fuera poco, en los vientos, “Nada Me Podrá Vencer” contó con el privilegio de tener a Marco Landa en la trompeta, y a Luis Vilchez en el saxofón, maestros máximos que se lucen en la canción con los “solos” de sus instrumentos.